Publicado el Deja un comentario

Descubre la planta medicinal que mas depura tu hígado.

Diente de león: propiedades, beneficios y contraindicaciones.

El diente de león se ha convertido, por sus propiedades y beneficios, en un importante depurativo. Conoce sus cualidades más destacadas.

El diente de león es probablemente una de las plantas medicinales más populares y conocidas, ya no solo por sus increíbles beneficios y propiedades sino porque antaño -y hoy en día- forma parte de los juegos de muchos niños cuando la toman entre sus manos y soplan sus pelillos de color blanco, los cuales desaparecen poco a poco llevados por el viento.

Entre otros aspectos el diente de león estimula la secreción de los órganos de la digestión, por lo que, precisamente, se utiliza en casos de trastornos digestivos en general (estreñimiento o hígado perezoso), y en hipoacidez gástrica.

Diente de leon

No en vano, científicamente se ha demostrado que el diente de león es capaz de aumentar de entre 2 a 4 veces la secreción de la bilis. Y es por ésto por lo que es recomendada para, por ejemplo, estimular aquellos hígados que sean “perezosos“.

También es importante sus beneficios en lo que se refiere a su acción sobre los cálculos renales, por su acción tanto diurética como laxante, si se me permite la redundancia.

Los beneficios del diente de león más importantes

Reconocida acción diurética

Precisamente por aquello que hemos indicado a lo largo de los anteriores párrafos, son sumamente importantes las distintas propiedades diuréticas que poseen el diente de león. Debemos indicar que esta acción diurética, sin efectos no deseados y totalmente segura, permite eliminar y limpiar de nuestro organismo las diferentes toxinas acumuladas. Es por ello por lo que, en cada cambio de estación, se recomienda hacer una cura de diente de león y, a su vez, en caso de excesos alimentarios.

Por otro lado, gracias a estas cualidades diuréticas se convierte en un remedio natural maravilloso a la hora de prevenir o evitar la retención de líquidos, al actuar como un buen depurativo de nuestro organismo.

Depurativo del hígado

El diente de león es un buen depurativo natural del hígado, un órgano fundamental para la vida y para nuestra salud e indispensable por la amplia diversidad de funciones que realiza cada día. En este sentido, esta planta medicinal es muy útil cuando necesitamos depurar nuestro hígado, al estimular la secreción de los diferentes órganos de la digestión, entre ellos el hígado.

Publicado el Deja un comentario

Estas son las 6 mejores hierbas para proteger el hígado

Para favorecer la salud del hígado, además de consumir estos remedios es muy importante que sigamos una dieta equilibrada y que reduzcamos la ingesta de grasas.

El hígado es uno de los órganos más grandes del cuerpo y su importancia radica en que cumple una amplia variedad de tareas imprescindibles para la vida.

Este se encarga de filtrar alrededor de un litro de sangre por minuto para hacer a un lado esas sustancias tóxicas que poco a poco se van acumulando.

También participa en la actividad hormonal y depura de gérmenes, alérgenos y sustancias químicas derivadas de los medicamentos.

Por si fuera poco, junto cpn la vesícula biliar es el responsable de la digestión de las proteínas y las grasas, y el correcto almacenamiento de los nutrientes.

Se estima que cerca de un 10% de la población mundial padece alguna enfermedad hepática como la fibrosis, la cirrosis, el cáncer o la hepatitis.

Estas disminuyen la calidad de vida del paciente y, en casos más graves, pueden conducir a la muerte.

Por fortuna, además de los tratamientos médicos que se han desarrollado para combatirlos, hay varias plantas que favorecen su limpieza y salud.

En este espacio queremos compartir las 6 mejores para que las consumas de forma regular.

1. Cardo mariano

Conocido en muchas culturas como el “guardián del hígado”, el cardo mariano es uno de los mejores remedios para prevenir y tratar las afecciones hepáticas.

Está comprobado que contribuye a depurar el hígado y la vesícula biliar y, además, tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a sanarlo.

Su ingesta regular elimina las sustancias de desecho y crea una barrera protectora frente a los radicales libres, el alcohol, los hongos y otros elementos perjudiciales.

También protege contra la diabetes, el exceso de colesterol y las enfermedades de sistema circulatorio.

Su consumo no debe ser superior a los 250 mg al día y se puede hacer a través de infusiones o ensaladas.

2. Alcachofa

Este tónico amargo tiene sustancias activas que regeneran los tejidos hepáticos mientras lo apoyan en sus procesos de digestión y depuración.

Sirve para combatir la urticaria, las alergias y las alteraciones en el pH sanguíneo. También previene la hepatitis, la insuficiencia renal y el exceso de colesterol.

Gracias a sus propiedades regula la producción de bilis y drena la vesícula biliar para evitar la formación de cálculos.

Su consumo puede hacerse a través de ensaladas, decocciones y batidos.

3. Raíz de diente de león

La raíz de diente de león es una hierba perenne que proviene de América del Norte y varios países de Europa.

Muchos consideran esta planta como una mala hierba, pero las raíces son un poderoso remedio que estimula los procesos de desintoxicación del cuerpo.

Está aconsejada para evitar el exceso de agua en los tejidos hepáticos, así como la inflamación de los mismos.

Aumenta la producción de la bilis e impulsa la eliminación de las toxinaspara facilitar la digestión.

Con esta hierba se obtienen cantidades significativas de vitaminas A, C y D, y minerales como el calcio y el hierro.

Se cuece en agua y se consume su té dos veces al día.

4. Hoja de menta

La menta es una planta medicinal que se ha empleado para promover el flujo normal de la bilis desde el hígado hasta la vesícula.

Los aceites esenciales que contiene apoyan la digestión de las grasas y mejoran la absorción de los nutrientes.

Sus vitaminas y minerales impulsan la expulsión de sustancias dañinas y previenen los daños en este órgano.

Se toma en infusión, limonadas o batidos.

5. Cúrcuma

Considerada también como una especia, la cúrcuma es uno de los mejores alimentos para remover las toxinas que se quedan atrapadas en la sangre y el hígado.

Su compuesto activo, la curcumina, tiene un efecto antiinflamatorio y antioxidante que restaura la salud hepática para un óptimo desempeño de sus funciones.

Su acción antioxidante participa en la filtración de la sangre y ayuda a eliminar las partículas dañinas presentes en esta.

Se utiliza para aliviar las condiciones que afectan al sistema circulatorio y es buena para el crecimiento de la flora bacteriana.

Está comprobado que su ingesta impulsa la depuración del hígado y frena el crecimiento de células anormales.

Se puede añadir en batidos, sopas, ensaladas y muchas otras recetas.

6. Celidonia mayor

La celidonia mayor es una planta que se utiliza como complemento de la limpieza del hígado y la vesícula biliar. Contiene sustancias activas que impiden la acumulación de moléculas dañinas y toxinas.

La historia cuenta que los griegos la emplearon como agente desintoxicante para mejorar la circulación y la salud en general.

Esta hierba estimula la bilis en el hígado y apoya la actividad de las enzimas en el páncreas.

Se consume a modo de infusión, sin exceder las tres cucharadas (30 g) al día.

Es importante que tengas presente que la ingesta de estas hierbas debe estar apoyada con una alimentación balanceada y reducida en grasas.

Los buenos hábitos de vida son determinantes para proteger este importante órgano.

 

Fuente: mejorconsalud.com