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Beneficio del ajo en capsulas.

Si has ganado este verano unos kilos, ahora es el momento para empezar a perder peso, entre otros productos naturales el Ajo es un gran aliado en tu dieta.

 

El ajo era usado como medicamento natural mucho antes de ser usado como condimento. El Codex Ebres, un papiro egipcio que data del 1550 A.C, contiene 22 beneficios del ajo con finalidad curativa en cardiopatías, parásitos intestinales, tumores… Ya en las civilizaciones mas antiguas, el ajo se consumía y era recomendado para dar energía y proveer protección contra todo tipo de males.

El ajo es un alimento con muchos beneficios y propiedades. Además lo podemos considerar imprescindible en nuestra cocina y es relativamente sencillo de sembrar y cultivar en tu huerto urbano o jardín. Es una planta medicinal que podemos cultivar nosotros mismos.

Tomando el ajo en capsulas, obtenemos todos sus beneficios, pasando desapercibido el olor característico del ajo crudo.

Muchos beneficios pero también algunas contra indicaciones. En grandes dosis puede ser perjudicial, han de evitarlo las personas que sufren dolores de cabeza y biliosidad. Tampoco es recomendable en mujeres durante el periodo de lactancia.

Beneficios del ajo.

Antibiótico.

En 1858 Louis Pasteur demostró que el ajo era un antibiótico natural muy recomendable, demostró en laboratorio que detenía el crecimiento de bacterias. En la II Guerra Mundial, ante la escasez de antibióticos, el ejército ruso lo utilizó masivamente para sus enfermos y heridos en combate.

Dolor de oído.

Este remedio hay que usarlo con mucha precaución ya que el oído es una zona muy delicada. Machacamos un diente de ajo y lo ponemos con una cucharada de aceite de oliva caliente en un recipiente, lo dejamos reposar 5 minutos. Lo colamos y dejamos enfriar, para finalmente colocar unas gotas en el canal auditivo.

Reumatismo.

Machacar ajos y aplicarlos en las partes afectadas alivia los dolores reumáticos.

Insomnio.

Cenar una ensalada de ajos con lechuga nos ayudará a conciliar mejor el sueño.

Limpiador facial.

Algunas mujeres usan el ajo como limpiador facial. Para aplicarlo se hace una pasta fina de ajo, mezclándola con un poco de aceite de oliva y azúcar. Se aplica de forma circular en la cara para finalmente enjuagar con agua. Si tenéis heridas mejor no usarlo porque puede escocer bastante.

Manchas en la cara.

Machacar ajos y aplicar sobre las manchas. Comer un diente de ajo crudo al mismo tiempo, durante varios días.

Controla el colesterol.

Un estudio de la Escuela de Medicina de la Universidad Stanford, señala que la alicina que contiene el ajo reduce los niveles de colesterol total y triglicéridos altos. La alicina es un compuesto azufrado que se encuentra en el ajo que solo aparece cuando el ajo es machacado o cortado.

Mejora la circulación.

Al ayudar a disminuir el colesterol, se disminuyen también las obstrucciones arteriales o arteriosclerosis que es la causa de la mayoría de infartos de corazón y derrames cerebrales. El principal efecto positivo del ajo proviene de la vitamina B, misma que reduce los niveles de homocisteína, una sustancia que puede dañar las paredes de los vasos sanguíneos y del selenio que ayuda a combatir las enfermedades del corazón.

Es un buen aliado para combatir las varices, un excelente alimento a la hora de desinflamar las venas y mejorar la circulación.

Aliado contra la hipertensión.

La alicina del ajo es especialmente eficaz para mejorar la circulación de la sangre.

Mejora la digestión.

Tomar ajo favorece la secreción de jugos estomacales, su acción antiséptica y antibiótica combaten numerosas enfermedades del aparato digestivo.

Resfriados y gripes.

Se le atribuye un efecto descongestionante en el tratamiento de las afecciones en las vías respiratorias, resolviendo las congestiones, promoviendo la desinfección, desinflamando los bronquios y como expectorante. Coma tres a cuatro dientes de ajo al día, preferiblemente crudo y triturado, añadir a las sopas, guisos, salsas para pastas y aderezos para ensaladas.

Afrodisíaco.

El ajo se ha usado como un afrodisíaco desde tiempos antiguos. Los científicos han descubierto que el consumo de ajo puede aumentar el deseo sexual de los hombres que experimentan impotencia, ya que el ajo ayuda a la circulación y al bombeo de la sangre hacia las extremidades.

Acné.

El poder antioxidante del ajo ayuda a la piel y demás tejidos a regenerarse y mantenerse jóvenes. Las mascarillas de ajo suavizan la piel y la fortalecen, además de ayudar a la regeneración celular, entre los remedios caseros es muy popular para combatir el acné. Se corta un diente de ajo por la mitad y frotamos la cara utilizando la parte interna del ajo en contacto con la piel, dejar unos minutos y lavar bien con jabón neutro para quitar el olor, las propiedades antibacterianas del ajo ayuda a disminuir la aparición de acné y logran hacer remitir el que ya tengamos.

Infecciones intestinales.

El ajo ayudaría a combatir las infecciones intestinales causadas por los alimentos incluso mejor que algunos antibióticos, según lo hallado por un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad Estatal de Washington.

El ajo crudo es una excelente opción natural para expulsar parásitos intestinales. Se recomienda como parte de una dieta depurativa, que también incluye miel, jugo de limón, semillas de calabaza, zanahorias y remolachas. El ajo consumido en cantidades de aproximadamente tres dientes diarios ayuda para que los parásitos salgan del tracto digestivo.

Pesticida.

Es recomendable plantar ajos por todo nuestro huerto. Puedes elaborar un insecticida usando alcohol y ajo, para usarlo como: Insecticida, repelente y fungicida, casero y ecológico.